Agua, Saneamiento e Higiene

El agua potable y el agua no potable perjudican la salud debido a enfermedades como la diarrea, el agua subterránea extracontaminada sin tratar y el agua superficial que se utiliza para beber, irrigar, bañarse y para fines domésticos.La contaminación química del agua sigue representando una carga para la salud, ya sea de origen natural, como el arsénico y el fluoruro, o antropogénica, como el nitrato.Un lavado seguro y suficiente juega un papel clave en la prevención de numerosas ETD, como el tracoma, los helmintos transmitidos por el suelo y la esquistosomiasis. Por lo tanto, la necesidad de tiempo para hacer que el suministro de agua y saneamiento juegue un papel clave para el sistema de salud.La evidencia sugiere que mejorar los niveles de servicio hacia la disponibilidad de agua potable segura gestionada es un desafío global. Regular el agua corriente o las conexiones a las alcantarillas con tratamiento de aguas residuales puede mejorar drásticamente la salud.