La cara oculta de la moneda - La imagen real de los herbicidas

La competencia entre malas hierbas y cultivos es un factor importante que limita la producción rentable de cultivos. Causan pérdidas significativas en la agricultura, la silvicultura, la acuicultura, el suministro de agua y otras empresas humanas. Las malas hierbas afectan a la salud y a la calidad de vida de las personas en todo el mundo. En el pasado, los agricultores gastaban mucha energía en el control de las malas hierbas, utilizando diferentes métodos, todos ellos no del todo eficaces. Hoy en día, los herbicidas son uno de los factores cruciales en el desarrollo de la producción agrícola. Sólo los herbicidas podían controlar las malas hierbas de forma eficaz y rentable, ahorrando mano de obra, reduciendo la erosión del suelo, ahorrando energía, aumentando la eficacia y el rendimiento de la producción de cultivos, mejorando la calidad de los alimentos, mejorando la conservación del suelo y garantizando una alimentación estable y predecible. Los herbicidas conducen a una agricultura más sostenible y su uso tiene beneficios económicos para toda la sociedad. El uso de herbicidas ha creado amenazas considerables para la salud humana y el medio ambiente. En ocasiones, diferentes factores intervienen en el fracaso de los herbicidas en condiciones de campo, la mayoría de ellos debidos a errores humanos. Los riesgos para la salud y el medio ambiente asociados al uso de herbicidas son en gran medida un problema evitable.