La domesticación de las plantas

El carácter ornamental de las plantas es una fuente universal de inspiración y contemplación en los campos del arte y el diseño. Vinculado a la idea de naturaleza, tiene connotaciones espirituales, emocionales, filosóficas, temporales y vitales. Su fascinante belleza intriga y desafía, mientras que su geometría estructural sigue siendo un enigma para muchos científicos. Además, las plantas parecen estar dotadas de una forma de inteligencia y, lo que es más seguro, de sensibilidad. Las virtudes descontaminantes de las plantas siguen siendo también una apuesta segura para limpiar nuestros entornos urbanos. Todas las características misteriosas, seductoras y a la vez útiles de las plantas las convierten en una herramienta única a la que se puede dar forma. Lo vivo es sin duda una formidable fuente de inspiración, que conduce al desarrollo de un diseño más ecológico y más humano. Pero entonces, ¿dirigir nuestra mirada hacia las plantas no sería una solución pertinente para la creación de productos más respetuosos, más perennes, incluso atemporales?